El Super Bowl 58 entre los Kansas City Chiefs y los San Francisco 49ers tendrá un elemento especial: la disparidad salarial entre Patrick Mahomes y Brock Purdy.
A pesar de liderar a San Francisco al Super Bowl, el novato quarterback Brock Purdy ganará 3.7 millones en cuatro años, mientras que Patrick Mahomes, en su séptima temporada, tiene un contrato de 450 millones, creando una brecha de 446 millones entre ambos.
Sin embargo, la presión en el emparrillado será la misma para ambos jugadores en Las Vegas.
Purdy, con un salario más bajo, tiene todo que ganar y poco que perder luego de que se le presenta la oportunidad de demostrar su valor financiero en el campo.
Aunque Mahomes tiene un contrato gigantesco, el rendimiento de Purdy podría cambiar la narrativa.
Pero eso sí, en el 2025 cuando Purdy se convierta en agente libre, podría ver la recompensa de su rápido ascenso.
Mientras tanto, su salario actual se convierte en una ventaja para el equipo al permitir más inversión en otras posiciones clave.
La liga limita los salarios de los jugadores en sus primeros cuatro años, lo que hace crucial aprovechar la eficiencia financiera de un quarterback económico como Purdy antes de que su salario se dispare.
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