Checo Pérez arrancó de la peor manera posible el fin de semana del Gran Premio de Hungría en el circuito de Hungaroring.
Y es que apenas habían pasado tres minutos del primer entrenamiento libre cuando, en condiciones de pista seca, el piloto de Red Bull pisó hierba con sus neumáticos y se estrelló en un muro de contención de la curva 5 del circuito húngaro.
Pérez fue a parar directamente contra las defensas, impactando a gran velocidad y causando serios daños en la parte delantera de su monoplaza, el cual presenta importantes mejoras para este fin de semana en Hungaroring.
“No puedo creer esto”, se escucho decir a Checo Pérez por la radio de su vehículo.
Ahora, los mecánicos tendrán que trabajar a marchas forzadas para poner listo el auto de ‘Checo’ Pérez para la competencia del fin de semana.
Debido al incidente, la sesión fue detenida con bandera roja durante espacio de ocho minutos para retirar al coche y a Pérez de la pista.
Este accidente llega en el peor momento posible para el piloto de Guadalajara, ya que se encuentra metido en una seguidilla de cinco sesiones de clasificación donde no ha podido alcanzar la Q3, siendo su más reciente intento una eliminación en Q1 en el pasado Gran Premio de Gran Bretaña.
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