La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) calificó como “claramente regresiva” y un “agravio a la vida democrática del país” reforma electoral propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador y que se discute en la Cámara de Diputados.
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Mediante un comunicado, el organismo que aglutina a los obispos mexicanos refirió que intereses “ideológicos inapropiados” son los que están detrás de la iniciativa de reforma electoral.
“Ningún ciudadano y menos los gobernantes que juraron guardar y hacer guardar la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos, tienen derecho a impulsar reformas que eliminen o comprometan la fortaleza de las Instituciones que son el soporte del Estado Mexicano, como es el caso del INE y del TEPJF. La sola pretensión de hacerlo pone en entredicho la calidad moral de quienes la impulsan”, señalan los obispos al fijar su postura.
Obispos reconocen la labor del INE
La reforma impulsada por el presidente López Obrador ha desatado una serie de controversias desde que la propuso en abril pasado, a pesar de las ‘intenciones’ del tabasqueño para que se garantice un ejercicio mayor de democracia, imparcialidad, legalidad y transparencia en los comicios electorales.
La CEM emitió un comunicado al respecto este lunes 31 de octubre, en el que se pronunció en contra de dicha reforma.
En un primer momento reconocieron las labores que el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) han realizado en los últimos 25 años para que los procesos electorales se lleven a cabo de manera justa, equitativa y transparente, tanto en los generales como en la renovación de los cargos de elección popular.
“El INE tiene una gran aceptación de la ciudadanía, siendo una de las Instituciones más confiables para los mexicanos”, aseguraron los obispos católicos de México, por lo que externaron su preocupación ante la iniciativa del Ejecutivo Federal de una reforma constitucional en materia electoral.
Si bien reconocieron que todo proceso puede mejorar, como el paso del Instituto Federal Electoral (IFE) al INE, los obispos indicaron que ni los ciudadanos ni los gobernantes tiene derecho a impulsar reformas que eliminen o comprometan las Instituciones del país.
“(La reforma electoral) es claramente regresiva, más aún, constituye un agravio a la vida democrática del país, reforma destinada a afectar la representación y el equilibrio de las minorías y mayorías, llevando el control de los comicios hacia el ámbito del gobierno federal centralista”
Entre los posibles agravios que dicha reforma representa, según el CEM, destaca la afectación a la gestión presupuestal, las repercusiones en su autonomía ciudadana y en su imparcialidad partidista, de manera que exhortaron a los poderes Ejecutivo y Legislativo a no poner en riesgo la estabilidad y gobernabilidad democrática del país.
“La sola pretensión de hacerlo pone en entredicho la calidad moral de quienes la impulsan”, sentenciaron los representantes del Episcopado Mexicano, quienes finalmente apelaron a la prudencia legislativa para defender a las instituciones electorales de México.