La Máquina del Cruz Azul finalmente arrancó en el Clausura 2024.
Lo hizo por apenas un gol, contra el sotanero general y con un hombre de más durante más de 50 minutos, pero al menos triunfó ante Mazatlán y remontó con goles de sus dos delanteros principales, Toro Fernández y Cuate Sepúlveda respondieron y le dieron los tres puntos a Cruz Azul. 2-1 final.
La Máquina, urgida por un buen resultado, comenzó con la propuesta ofensiva. En casa, con el apoyo de su gente y contra el sotanero del torneo parecía que sería fácil conseguirlo, aunque no todo empezó como esperaba.
Si bien lograron una presión insistente no pudieron reflejarlo en el marcador en las primeras opciones. Un remate de Willer Ditta y uno más de Gonzalo Piovi al marco de Hugo González fue de lo más relevante.
Mazatlán aguantó y sorprendió cuando nadie lo esperaba. En su primera oportunidad abrió el marcador. Una jugada personal del Tuti fue suficiente. Gustavo del Prete condujo varios metros y ningún cementero logró detenerlo. El refuerzo cañonero se quitó de encima a Rivero, habilitado como central, y superó al portero Kevin Mier.
Cruz Azul tuvo que remar contracorriente, pero no pasó mucho tiempo para su reacción.
Uriel Antuna bajó el balón con el pecho y parecía perderse por la línea final, pero el Brujo lo rescató, centró y el Toro embistió por primera ocasión como goleador cementero. Aunque después, Gabriel Fernández pasó de héroe a villano al fallar su doblete al fallar de forma increíble a un metro y medio de la red.
Cruz Azul controla la presión
La visita intentó reaccionar, pero en esa enjundia por hacerlo sufrió una expulsión dolorosa.
Joaquín Esquivel barrió por detrás a Huescas y lo que primero fue una amonestación, cambió a tarjeta roja por el VAR y el árbitro Luis Enrique Santander lo expresó en el sonido local. Eso fue bien aprovechado por los capitalinos.
En la última jugada del primer tiempo, Antuna mandó un centro alto por derecha y el otro atacante respondió también. Ángel Sepúlveda remató de cabeza y puso el segundo para la voltereta celeste.
En el complemento pasó lo esperado. Cruz Azul tuvo el dominio por tener un hombre de más en el campo. El Toro pudo marcar otro más, pero esta vez el poste se lo impidió.
Sepúlveda también tuvo otra opción, sólo que González salvó de forma milagrosa con una brava reacción doble. El tercer tanto no cayó ni por equivocación por más ocasiones de los de Martín Anselmi.
El tiempo siguió y no hubo más emociones. La Máquina tardó, tuvo algunos problemas, pero apenas arrancó ante el peor equipo del torneo.
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