Loretta Ortiz, Margarita Ríos Farjat y Alberto Pérez Dayán, ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), unieron sus voces para oponerse a la propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador de elegir a los jueces por voto popular.
Durante el seminario “El derecho a la información, la importancia de la transparencia”, en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, los tres ministros expresaron su desacuerdo con esta iniciativa.
Ortiz Ahlf, a pesar de haber sido señalada como cercana a la ‘4T’, repudió la idea de que los jueces sean elegidos por voto popular.
La ministra afirmó de manera determinante que “no podemos, los que aspiramos a ser ministros, llegar por un voto popular”, destacando la necesidad de un perfil específico para los jueces de la Corte.
Ríos Farjat se sumó al rechazo, planteando la posibilidad de que jueces electos popularmente necesiten mantener el apoyo popular, lo cual podría condicionar sus decisiones.
Asimismo, destacó la importancia de que el Poder Judicial sea integrado de manera distinta, a través de representantes populares y con garantías.
Pérez Dayán alertó sobre el riesgo para la seguridad jurídica, señalando que comprometer a los jueces con los electores pone en peligro la imparcialidad y la objetividad en sus decisiones.
El ministro cuestionó si la sociedad querrá escuchar del juez lo que espera y si esto condicionará la permanencia del juez en el cargo.
La postura de estos ministros destaca la preocupación por la independencia judicial y la posible influencia de consideraciones populares en el ejercicio de la justicia.
Loretta Ortiz ha sido señalada como una funcionaria cercana al presidente Andrés Manuel López Obrador, pues fue él quien la nominó para llegar al máximo tribunal y ha apoyado con su voto la postura del Gobierno federal en diversos diferendos que han llegado al pleno.
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