La armadora armadora JAC, de origen chino con operaciones en México, anunció la expansión de su planta de ensamblaje en Ciudad Sahagún, Hidalgo.
La empresa, cuyo mayor accionista es el empresario Carlos Slim a través de Giant Motors México, tiene previsto incorporar dos nuevas líneas de producción para el segundo trimestre de 2024. Esta decisión surge como parte de la estrategia de la compañía para ingresar al competitivo segmento de camiones pesados y diversificar su oferta de vehículos en el mercado mexicano.
Con la adición de estas líneas de producción, JAC operará un total de siete, lo que refleja una previsión de la creciente demanda asociada a la presencia de vehículos eléctricos y camiones en el mercado automotriz. La expansión no solo implica un aumento en la capacidad de producción sino también la creación de nuevos empleos, estimándose un incremento del 50% en comparación con la plantilla actual.
Elías Massri, CEO del Consejo de Giant Motors México, compartió detalles sobre esta ambiciosa iniciativa en una entrevista con El Economista. Según Massri, la planta de JAC, tras la expansión, tendrá la capacidad de producir hasta 60,000 unidades, abarcando desde subcompactos, SUVs, vans y pickups hasta la recién incorporada línea de camiones pesados.
Giant Motors, propietaria de JAC México, ha logrado atraer a clientes de renombre, como BIMBO, FEMSA, Bonafont, Soriana, Amazon, Liverpool y Walmart, interesados en la adquisición de vehículos eléctricos. Se proyecta que las ventas alcancen las 30,000 unidades en 2024.
Hasta octubre de este año, JAC ha comercializado 16,567 unidades, registrando un notable crecimiento del 29.1% en comparación con los primeros diez meses de 2022. La expansión hacia la fabricación de camiones pesados se alinea con la estrategia de JAC para atender la creciente demanda en el sector de flotillas, consolidándose en la distribución de última milla y en distancias más extensas.
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