Alberto Modiano, vicepresidente de Nestlé México, consideró que México enfrenta desafíos significativos en materia de inseguridad en el transporte de mercancías, lo que afecta los beneficios del nearshoring en el país.
El ejecutivo destacó que las empresas están invirtiendo en tecnología para abordar este problema, pero reconoció que los grupos delincuenciales en México se han profesionalizado y utilizan los mismos canales de distribución para vender productos robados.
Modiano señaló que los grupos criminales operan como empresas profesionalmente armadas, con logística y vendedores propios. Comercializan los productos robados a través de los mismos canales de distribución o en mercados donde detectan oportunidades.
“Los grupos criminales son empresas profesionalmente armadas, tienen su logística y vendedores. Comercializan los productos en los mismos canales de distribución o en mercados en donde observan que algún tipo de producto no existe”, lamentó en declaraciones publicadas en el periódico Reforma.
En el marco del primer Supply Chain Day, organizado por GS1 México, Modiano mencionó que el robo a transporte en regiones como el Bajío y las carreteras hacia Puebla y Orizaba son puntos preocupantes para la distribución de productos.
Además, enfatizó que incluso la Guardia Nacional se enfrenta a desafíos en la lucha contra la delincuencia, pues los delincuentes muchas veces están mejor equipados.
Mauricio Salvatori, director de Distrito y líder de la división de Supply Chain de Estafeta, coincidió en que la inseguridad en las carreteras es un factor de preocupación para las empresas.
En respuesta, explicó, Estafeta ha invertido en medidas de seguridad no solo para proteger las mercancías, sino también para garantizar la seguridad de sus colaboradores.
Modiano hizo hincapié en que México tiene una ventana de seis años para capitalizar las oportunidades del nearshoring.
Sin embargo, subrayó la necesidad de mejorar la infraestructura en el país, destacando que a pesar de ser un país con numerosos tratados comerciales, la falta de inversión en infraestructura lo coloca en desventaja.
“El nearshoring es una realidad pero no estamos haciendo lo necesario para capitalizarlo, no tenemos la tecnología, la infraestructura, la energía eléctrica”, enfatizó.
Por último, Salvatori mencionó el desafío de la saturación en los puertos debido al aumento en la importación de vehículos, lo que representa un reto para todos los actores de la cadena logística en México.
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