En conmemoración del noveno aniversario de la desaparición de los 43 normalistas de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, Guerrero, sus familiares y diversos grupos de apoyo marcharon este martes desde el Ángel de la Independencia hasta el Zócalo capitalino, exigiendo justicia y acciones concretas para esclarecer el caso que conmovió a México y al mundo.
La marcha, que reunió a miles de personas, se desarrolló a lo largo de importantes vías de la Ciudad de México. Inició desde el icónico Ángel de la Independencia, avanzando por Paseo de la Reforma, Avenida Juárez, Eje Central y 5 de Mayo, hasta llegar finalmente al Zócalo capitalino.
Durante la movilización, algunos manifestantes realizaron diversas acciones de protesta. En el Antimonumento a los 43 normalistas desaparecidos, se interrumpió el servicio del metrobús y se realizaron pintas en la Fuente de la República y en algunos edificios cercanos. También se llevó a cabo la colocación de las identidades de los 43 normalistas en las rejas de la entrada al Senado.
Uno de los momentos más tensos ocurrió a la altura de la Glorieta de los Desaparecidos, donde un contingente que se dirigía al Zócalo exclamó: “Señor Presidente, tiene dos caminos, estar con el pueblo o con los asesinos.”
Vidulfo Rosales Sierra, abogado de los padres de los estudiantes desaparecidos, aprovechó la ocasión para exigir al gobierno federal avances en la investigación y la obtención de información solicitada a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Rosales Sierra declaró: “Hoy en día tenemos detenidos, pero el paradero no lo tenemos. Hay más de 20 sitios que señalan los testigos informantes, en donde pudiese haber llevado a los estudiantes.”
La marcha contó con la presencia de madres y padres de los 43 normalistas desaparecidos, quienes corearon el grito: “Vivos se los llevaron, vivos los queremos.” Además, se unieron a la movilización alumnos de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos,” miembros de la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FETSE), del Sindicato Nacional de Telefonistas, del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México, colectivos de desaparecidos y colectivos estudiantiles.
La solidaridad se hizo sentir cuando estudiantes de diferentes universidades se unieron a la marcha y corearon el avance de los camiones que transportaban a los familiares de los 43 desaparecidos de Ayotzinapa con un pase de lista.
La protesta también se manifestó en el sistema de transporte público, donde algunos estudiantes que se dirigían desde la Universidad Nacional Autónoma de México pintaron varios vagones del Metro de las Líneas 1 y 3.
El “Bloque Negro” inició pintas en las aceras de Paseo de la Reforma, marcando así un día de protesta y conmemoración en busca de justicia y respuestas en el caso de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
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