La economía en México mostró un inicio más moderado en la segunda mitad del año, con un crecimiento estimado del 0.2% en julio en comparación con junio, según el Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE) del Inegi.
Esta menor dinámica económica se ha mostrado tanto en las actividades secundarias como en las terciarias, siendo estas últimas las que impulsaron la actividad en la primera parte del año.
En el ámbito de la industria, el sector secundario, se espera un crecimiento del 0.3% en julio, comparado con el 0.6% registrado en junio.
En el sector de servicios, las actividades terciarias, se anticipa un crecimiento más lento del 0.2% en julio, en contraste con el 0.3% del mes anterior. Todas estas cifras están ajustadas por efectos estacionales.
Este enfriamiento económico en el segundo semestre del año era una expectativa previa, ya que se preveían los impactos de los aumentos en las tasas de interés tanto en México como en Estados Unidos.
Si se observa la comparación anual, también se aprecia un enfriamiento en la actividad económica. Se espera que el crecimiento en julio sea del 3.4%, en comparación con el 3.9% registrado en junio.
A pesar de esta desaceleración, el IOAE acumularía cuatro meses con un crecimiento superior al 3.0%.
Expertos han señalado que México tiene el potencial para crecer a tasas más elevadas de manera sostenida, sin embargo, consideran que su modelo económico ha sido históricamente incongruente e inconsistente, lo que ha resultado en un crecimiento anémico y persistente.
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