El 26 de junio se conmemora el Día Internacional de Apoyo a las Víctimas de la Tortura, una fecha que busca crear conciencia sobre esta práctica inhumana y brindar apoyo a aquellos que han sufrido las consecuencias.
Esta efeméride estableció con el objetivo de erradicar la tortura en todas sus formas y manifestaciones, y mandar un mensaje a los gobiernos y a la comunidad internacional sobre su responsabilidad de proteger y promover los derechos humanos.
El origen de esta conmemoración se remonta al 26 de junio de 1987, cuando la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes.
Este tratado internacional definió la tortura como un crimen y estableció la obligación para los Estados de prevenir, investigar y sancionar este delito, así como de brindar reparación a las víctimas.
La tortura es una práctica que viola los derechos fundamentales de las personas y deja secuelas físicas y psicológicas permanentes.
A pesar de la prohibición universal y los esfuerzos internacionales para combatirla, sigue siendo una realidad en muchos países, incluido México.
Según informes de organizaciones de derechos humanos, México ha enfrentado serios desafíos en la erradicación de la tortura.
Durante años, ha habido denuncias de tortura y maltrato por parte de las fuerzas de seguridad y agentes estatales. Las víctimas de estos abusos a menudo sufren impunidad, ya que los casos rara vez son investigados adecuadamente y los responsables raramente son llevados ante la justicia.
De acuerdo con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos de México, en 2021 se recibieron un total de mil 259 quejas por tortura y tratos crueles, inhumanos o degradantes.
Estas cifras reflejan la persistencia de una grave violación de los derechos humanos en el país y la necesidad de tomar medidas para investigar estos casos, enjuiciar a los responsables y brindar justicia a las víctimas.
A nivel mundial, las cifras de tortura también son alarmantes. Según el Informe Anual 2022 de Amnistía Internacional, al menos 141 países llevaron a cabo actos de tortura o maltrato durante el año pasado.
Estas violaciones se produjeron tanto en contextos de conflicto armado como en situaciones de paz. La impunidad y la falta de rendición de cuentas siguen siendo obstáculos significativos en la lucha contra la tortura en todo el mundo.
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