La corrupción a nivel nacional y estatal a lo largo de las últimas décadas permitió complicidad de anteriores gestiones con la delincuencia, estimó el gobernador de Hidalgo, Julio Menchaca.
“La corrupción generó condiciones que lastiman y flagelan a la sociedad, por el actuar de personas que no tienen escrúpulos, acciones como el robo, chantaje, distribución de enervantes, ese veneno que se genera no sólo en los y las jóvenes, sino a todos los integrantes de la familia, y prácticas que vienen a deshonrar la convivencia y bienestar de los y las hidalguenses”, explicó.
En el marco de la instalación del Consejo Estatal de Seguridad, el titular del Ejecutivo estatal dijo que la entidad tiene un gran reto por delante para abatir los índices de inseguridad al tiempo de erradicar la imagen que permanece en la ciudadanía de una policía corrupta y abusiva.
“Debe haber un cambio en esa percepción de la persona que usa el uniforme, eso sólo se logra teniendo contacto directo con la sociedad, sólo así vamos a modificar ese esquema de policía corrupto y abusivo, porque estoy convencido que los y las integrantes de esta corporación son personas integras, pero hay malos elementos que desprestigian”, remató.
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