Los dos últimos minutos de la caja negra del helicóptero de la Marina que participó en la captura de Caro Quintero se perdieron en la caída de la aeronave el 15 de julio pasado en los Mochis, Sinaloa, donde 14 infantes fallecieron y uno quedó lesionado.
PUEDES LEER: Helicóptero de la Marina se desploma; hay 3 muertos y ahora fue en Tabasco
De acuerdo con fuentes de la Semar, los dos últimos minutos de la caja negra, no se pudieron recuperar, debido a que se borraron por el colapso de los sistemas de la aeronave al caer a tierra.
El resultado de la pérdida de los dos minutos es que nunca se sabrá cuáles fueron las últimas indicaciones a los pilotos de la aeronave.
Las fuentes consultadas, aseguraron que minutos después del accidente aéreo, ya se tenía conocimientos que las tres aeronaves navales, se quedaron sin combustible.
El operativo de captura que movilizó elementos de la Unidad de Operaciones Especiales (UNOPES), utilizó tres helicópteros Black Hawk para la detención de Caro Quintero, los cuales nunca apagaron sus motores, por lo que consumieron el combustible durante la acción.
PUEDES LEER: Falta de combustible, causa de la caída del helicóptero de la Marina en Sinaloa
Cómo fue el operativo de la captura de Caro Quintero
De acuerdo con el coordinador de vuelos que se encontraba en la aeronave número tres, la logística fue la siguiente.
Los helicópteros Black Hawk 1 y 2, dieron apoyo perimetral a las células de la UNOPES en el aire, mientras el tercero permaneció en tierra con el motor encendido.
Al término del operativo, las tres aeronaves que estuvieron en el municipio de Choix, Sinaloa se enfilaron hacia Los Mochis, Sinaloa.
La aeronave 2 transportaba a Rafael Caro Quintero, la primera reportó que se había quedado sin combustible, lo que generó su aterrizaje en una zona considerada “caliente”, debido a que se encontraba en territorio del Cártel del Pacífico.
Las aeronaves 2 y 3 siguieron la trayectoria al aeropuerto Internacional de Los Mochis, a tres millas de la llegada, la tercera aeronave, reportó que se había quedado sin combustible; aun así siguió el vuelo para dar seguridad al Black Hawk, donde trasladaban al líder del crimen organizado.
Los dos minutos que se perdieron de la caja negra a decir de los especialistas en aeronáutica, contenían las últimas instrucciones del coordinador de vuelos que falleció en la caída de la aeronave naval el pasado 15 de julio del presente año.