El autor del tiroteo en el metro de Brooklyn que dejó más de una veintena de heridos fue detenido por la policía; algunos medios de comunicación dieron a conocer que él mismo llamó a la policía para dar su ubicación.
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El detenido, que fue identificado por las autoridades como Frank R. James, fue trasladado en la tarde del miércoles a una comisaría del barrio East Village de Manhattan y se enfrentará a cargos relacionados con terrorismo en un tribunal federal de Brooklyn.
De esta forma se puso fin a la búsqueda del hombre de Wisconsin, de 62 años, quien meses antes de sembrar el terror en un metro de Brooklyn publicó varios videos amenazantes en YouTube en los que hablaba sobre la violencia y defendía la necesidad de más tiroteos masivos en el país, utilizando a menudo un lenguaje racista y misógino.
He tenido que pasar por mucha mierda, todo lo que puedo decir es que he querido matar gente, he querido ver gente morir, pero oye, no quiero acabar en una maldita cárcel”, se le oye decir en el último vídeo que publicó el lunes, horas antes de sembrar el terror en el metro. “Hacen falta más tiroteos masivos, sí, necesitamos más tiroteos masivos para que la gente entienda”, asegura en otro vídeo publicado a finales de marzo.
Inicialmente, la policía de Nueva York solo identificó a James como “persona de interés” en la investigación. “No sabemos si tiene alguna conexión con el ataque del metro, eso aún está siendo investigado”, dijo el jefe de detectives de la policía de Nueva York, James Essig, en un encuentro con la prensa en la noche del martes en el que por primera vez se hicieron públicas dos imágenes del hombre.
A primera hora de la mañana del miércoles, el alcalde de la ciudad, Eric Adams, confirmó a la radio pública WNYC que, a partir de nueva información recibida por su equipo, el hombre pasó de ser considerado “persona de interés a sospechoso”, sin entrar en más detalles. En otra entrevista a la CNN, el líder demócrata advirtió que no pararían hasta detenerlo para llevarlo ante la justicia y responder “por sus horribles actos contra gente inocente”.
En la mañana del martes, en plena hora punta, Frank James se subió a un metro y cuando aún se encontraba dentro del vagón, se puso una máscara antigás y detonó dos granadas de humo que sacó de un carrito, según el relato de varios testigos. Fue entonces cuando empezó a disparar de forma indiscriminada en contra de los pasajeros antes de que el convoy entrara en la estación de la calle 36, en el barrio de Sunset Park.
Camioneta U-Haul, clave en el caso del tiroteo
La camioneta U-Haul se recuperó cerca de la estación y fue revisada por el escuadrón antibombas de la policía de Nueva York, dijeron las autoridades. El vehículo será transportado a un lugar forense donde las autoridades federales y locales podrán examinarlo en un ambiente controlado, dijo a CNN un alto funcionario policial.
El alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, le dijo a CNN previamente este miércoles que “vamos a atrapar a esta persona. Vamos a llevarlo ante la justicia y hacerlo responsable de este horrible acto contra personas inocentes”.
En total, 29 personas fueron hospitalizadas en relación con el tiroteo. Tenían lesiones que incluyeron heridas de bala, inhalación de humo o caídas al intentar escapar, dijeron las autoridades.
Los investigadores tienen un video de un teléfono celular de un testigo que muestra al sospechoso, le dijo a CNN una fuente policial.
La recopilación de pruebas del incidente “llevará algo de tiempo”, según Michael J. Driscoll, subdirector a cargo de la oficina local del FBI en Nueva York. Driscoll agregó que estaba agradecido por los residentes y testigos que ya han entregado información.